El concejal de Infraestructuras y los técnicos de la universidad esplicaron este martes las conclusiones de la investigación a los vecinos de El Algar

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Miércoles 13 Febrero 2019  |  Visto: 725 veces  |  Versión Imprimible

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Técnicos de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), junto al concejal de Infraestructuras, Juan Pedro Torralba, presentaron este martes, 12 de febrero, las conclusiones del estudio que han elaborado para abordar la rehabilitación de la emblemática Casa Rubio a los vecinos de El Algar, entre las que se encontraba la también concejala Mercedes García.

Tras la investigación, en la que han participado el director del director de la Escuela de Arquitectura, Carlos Parra, los ingenieros Gregorio Sánchez, Antonio Tomás y Eusebio Martínez, y la arquitecta e ingeniera de edificación Federica Calio, los técnicos han propuesto que la futura biblioteca que los vecinos quieren instalar en el inmueble se haga en la planta baja, al igual que la sala de exposiciones y se deje la planta superior para ubicar despachos u oficinas, que no deben tener que soportar más de 300 kilos por metro cuadrado.

Tal y como explicaron ayer Parra y Sánchez, una de las premisas iniciales del proyecto fue mantener la imagen original del edificio, ya que es una de las principales señas de identidad de la diputación de El Algar y cuya construcción data de 1895, por lo que su propuesta incluye la conservación tanto de la fachada como de la estructura.

“Nosotros queremos consensuar con los vecinos de El Algar la mejor forma de rehabilitar la Casa Rubio, pero consideramos que se trata de un edificio emblemático y que todos los trabajos que se realicen tanto en el exterior como en el interior deben respetar la estética original del edificio”, ha señalado el edil.

Entre los trabajos que proponen los técnicos de la UPCT destaca el refuerzo de los pilares interiores, mediante la colocación de un tronco cónico y unas placas para repartir mejor las cargas, y dejando uno de ellos con su imagen original como testigo. Además, se instaría un refuerzo de hormigón, manteniendo tanto la cúpula como el pavimento, con lo que se reduciría el riesgo que presenta actualmente ante movimientos sísmicos. Del mismo modo, se propone instalar una nueva escalera como vía de evacuación, un ascensor y la impermeabilización del suelo de la planta baja.

Este estudio ha calculado la capacidad de resistencia del inmueble, teniendo en cuenta que fue concebido para uso de vivienda, y a partir de ahí se han establecido los límites por plantas y secciones.

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