La Unidad de Calidad de Vida y Medio Ambiente detectó el sábado 20 de julio la venta de estos en dos bazares de la Gran Vía, en la Urbanización Porto Bello
Lunes 22 Julio 2019 | Visto: 753 veces
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La Unidad de Calidad de Vida y
Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cartagena, durante la campaña de inspecciones de establecimientos realizada en
La Manga, detectó este sábado
20 de julio la venta de punteros láser peligrosos en dos bazares de la Gran Vía,
en la Urbanización Puerto Bello.
Estos punteros láser están
registrados en la Red de alertas de AECOSAN (Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición), donde
se prohíbe su comercialización y
venta por riesgo de lesiones oculares.
Si un láser de
menos de cinco milivatios de potencia es apuntado al ojo de alguien, esa persona puede
parpadear o
desviar la mirada sin sufrir ninguna lesión ocular. Sin embargo, los mecanismos naturales de protección de ojo – como el reflejo de parpadeo – no tienen ningún efecto contra
los láseres con un poder de iluminación de más de cinco milivatios, provocando
daños graves de la retina, aún después de una exposición momentánea.
Tras ser comprobados por los agentes, se procedió a levantar
un acta de decomiso de 128 punteros láser de clase III, los cuales
fueron depositados en las dependencias de la Policía Local,
hasta su destrucción.
RECOMENDACIONES EN EL USO DE PUNTEROS LÁSER
1-
Nunca apunte o
alumbre a nadie con un señalador láser.
2-
No compre señaladores láser para los niños.
3- Antes de comprar un señalador láser,
asegúrese de que tenga la siguiente información en la rotulación:
- una leyenda que indique que cumple con las disposiciones del Capítulo 21 del CFR (Código de Reglamentaciones Federales).
- el nombre del fabricante o distribuidor.
- la fecha de fabricación.
- una advertencia de que debe evitarse la exposición a la radiación láser.
- el rango de clase, que va de Clase I a Clase IIIa. Los productos Clase IIIb y Clase IV deben ser utilizados única y exclusivamente por personas que tengan la capacitación adecuada y para aplicaciones en las que exista la necesidad legítima de utilizar estos productos de alta potencia.
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