Los grupos municipales del Partido Popular y Vox en el Ayuntamiento de Cartagena compartimos como principal misión impulsar el crecimiento y el desarrollo de Cartagena para que el municipio resuelva sus problemas y aproveche todas sus oportunidades en beneficio de los ciudadanos.
Ambos grupos coincidimos en que es imprescindible superar el bloqueo que se ha constatado durante el comienzo de la legislatura y conferir al gobierno y al Pleno la estabilidad que es precisa para actuar con eficacia al servicio de los ciudadanos y evitar que debates e intereses de carácter partidista dificulten la puesta en marcha de políticas y proyectos que urgen a Cartagena en un momento de transformación.
Desde estas premisas, ambos grupos hemos decidido elaborar un acuerdo de legislatura mediante el que garantizamos la estabilidad institucional imprescindible para impulsar las reformas, las inversiones y las políticas que necesita el municipio.
Nuestro pacto se cimienta sobre un acuerdo programático que reúne nuestras principales propuestas para fomentar el empleo, impulsar nuestra transformación industrial, diseñar el nuevo urbanismo, aumentar nuestra proyección turística y mejorar la vida de los ciudadanos con servicios eficaces.
Acordamos trabajar fomentando la libertad combatiendo la desigualdad, protegiendo a las personas y las familias en situación más vulnerable y colaborando con las entidades necesarias para su asistencia.
Ambos grupos tenemos idearios propios y diferenciados, pero centramos nuestro acuerdo en el gran espacio de coincidencia que mantienen nuestros programas, desde el convencimiento de que la mejor forma de trabajar para los cartageneros es superar con generosidad posiciones maximalistas y dogmáticas, siempre respetando los idearios de cada partido político.
Lo hacemos, conscientes de que sumamos dos de cada tres votos emitidos en las últimas elecciones municipales, pero convencidos de que el gobierno que vamos a construir va a estar al servicio de todos los cartageneros.
Por eso, la mayoría que suma nuestra representación en el pleno no será un obstáculo para seguir promoviendo el acuerdo con el resto de las formaciones políticas, desde el convencimiento de que son mejores las decisiones que más respaldo obtienen.